Cuando se acerca la navidad me encanta hacer colgantes para el árbol de navidad de encaje de bolillos en estas tardes de domingo cuando hace frío y no apetece salir. El encaje de bolillos tiene mucha tradición en la zona sur de Sajonia en Alemania y me trae muy buenos recuerdos a aquellos tiempos cuando era niña y me junté con las señoras aficionadas. El sonido de los bolillos sigue siendo música en mis oído. Un poco de nostálgica que me invade todos los años en las fechas navideñas.
